En el entorno VUCA en el que viven las organizaciones más allá del Coeficiente Intelectual y la Inteligencia Emocional, el Coeficiente de Adaptabilidad es fundamental en las personas.
Durante muchos años se ha pensado que la prueba del Coeficiente Intelectual, —que mide la memoria, el pensamiento analítico, la visión espacial y la capacidad matemática—, era la única forma de medir las perspectivas de trabajo. Pero, como dice el Profesor Luis Rojas Marcos, el Cociente Inteligencia es un indicador demasiado miópico y estricto como para ser, en sí mismo, útil.